Sal del Himalaya: propiedades y beneficios

La denominada como sal del Himalaya se caracteriza por ser un tipo de sal proveniente directamente de las montañas del Himalaya, en el Nepal, la cual posee más de 250 millones de años.

Sal del Himalaya

Se trata de un auténtico manjar para muchas cocinas, cocineros y chefs internacionales, gracias a que aporta a la cocina una gran diversidad de sabores, algo diferentes a los que aporta la sal de mesa común.

En este sentido, no hay duda que una de las principales diferencias entre la sal del Himalaya y la sal de mesa común es que la primera es una sal natural muchísimo más saludable.

Y es que tal y como veremos a lo largo de esta nota, si bien es cierto que la sal común incrementa el riesgo de padecer determinadas enfermedades (como por ejemplo la hipertensión arterial), la sal de Himalaya aporta interesantes beneficios para la salud.

Beneficios de la sal del Himalaya

A diferencia de lo que ocurre con la sal de mesa común, la sal del Himalaya es capaz de regular el contenido de líquidos en el cuerpo, beneficio que se traduce en que ayuda a equilibrar el exceso de acidez de las células (sobretodo las del cerebro).

Es útil en caso de gripes, resfriados o determinados trastornos respiratorios, dado que ayuda a eliminar las flemas y el moco de los pulmones, siendo útil para descongestionar los senos nasales (presenta de hecho un interesante efecto antihistamínico, convirtiéndose así en una positiva planta para las alergias primaverales).

Ayuda a regular los niveles de glucosa en la sangre, y es capaz incluso de estabilizar los latidos del corazón. Para los deportistas su consumo es también beneficioso, gracias a que es buena para la prevención de los calambres musculares.

Este artículo se publica solo con fines informativos. No puede ni debe sustituir la consulta a un Médico. Le aconsejamos consultar a su Médico de confianza.